Hoy, 18 de noviembre, se conmemora el Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos, una iniciativa impulsada por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC). Su objetivo es concienciar sobre los riesgos asociados al uso indebido de los antibióticos y realizar un llamamiento al consumo responsable, tanto en salud humana como en sanidad animal, para prevenir la aparición y el desarrollo de resistencia a los antimicrobianos. Además, del 18 al 24 de noviembre, se celebra, asimismo, la Semana Mundial de Concienciación sobre el Uso de los Antimicrobianos.
"Se puede conseguir un uso más responsable y prudente de los antibióticos actuando sobre su prescripción, sobre su venta y sobre la forma en la que se toman" explica Jesús Oteo, director del área CIBERINFEC. El investigador incide en la importancia de tomar las dosis adecuadas de medicamentos y evitar la automedicación y el almacenaje.
Desde el CIBERINFEC y, en particular, desde su programa 2 dedicado a este problema de salud, se trabaja en la vigilancia y seguimiento de la resistencia a los antimicrobianos tanto por métodos genéticos como fenotípicos en los hospitales, específicamente en las UCIs, y a nivel comunitario. Los equipos del CIBER estudian también las bases moleculares de la resistencia y la estructura poblacional de los microorganismos multirresistentes, sus trayectorias evolutivas y en modelos de selección y diseminación que permitan mejorar el uso de los antimicrobianos son también objetivos de este programa. "Un primer paso, imprescindible para tomar acciones eficaces, es conocer a qué nos enfrentamos" apunta el director de CIBERINFEC. Sin embargo, el conocimiento debe ser la base para la implementación de medidas clínicas y epidemiológicas que ayuden al control de esta problemática; como por ejemplo el desarrollo de programas de mejora de uso de antimicrobianos en unidades con elevado uso de antimicrobianos, o la implementación de equipos multidisciplinares del control de la infección.
Una de las iniciativas más importantes de CIBERINFEC en este sentido es el proyecto MePRAM, financiado por el ISCIII. Con un presupuesto total de 4 339 500 € para tres años, el proyecto quiere promover la implementación de la medicina de precisión contra la resistencia a antimicrobianos.
Este proyecto nace de la necesidad de encontrar un abordaje integral de esta problemática a través de un enfoque de medicina de precisión, que analizará la variabilidad en cada individuo para ofrecer un diagnóstico y tratamiento más ajustado. “Se implementarán nuevas técnicas genómicas, alternativas terapéuticas y se desarrollarán algoritmos de ayuda a la decisión mediante técnicas de machine learning y data mining dirigidos a personalizar las medidas preventivas de los pacientes” añade Oteo.
Además del trabajo de investigación que se realiza en el CIBER, hay multitud de iniciativas que promueven el Uso responsable de Antibióticos. Los Programas de Optimización de Uso de los Antibióticos (PROA), promovidos desde el Plan Nacional frente a la Resistencia a Antibióticos (PRAN), tratan también de minimizar los efectos adversos, controlar la aparición de resistencia y garantizar el uso de tratamientos coste-efectivos. Asimismo, la Red de Laboratorios para la Vigilancia de Microorganismos Resistentes, RedLabRA, coordinada desde el CNM-ISCIII, trabaja con el objetivo de lograr un diagnóstico microbiológico completo y de calidad, integrando la secuenciación genómica de los microorganismos resistentes a los antibióticos.